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Odynn Aguilar
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RESICO: Tu entrada a una vida fiscal saludable

RESICO es el régimen fiscal más reciente que el Servicio de Administración Tributaria (SAT) ha puesto a disposición de la población para reducir la informalidad en el país.

Este régimen tiene algunas bondades clave que, como profesional de la salud, puedes aprovechar para comenzar una vida fiscal bastante sana, enfocada en la prevención y no en buscar contratar servicios costosos que se aprovechan de la urgencia cuando el SAT te hace llegar requerimientos o auditorías.

Podemos definir RESICO como el conjunto de reglas que el SAT utiliza para calcular cuánto, cómo y con qué frecuencia pagarás tus impuestos.

Consideraciones

Estas reglas no solo afectan los números de tus ingresos y lo que puedan representar en impuestos, sino que también determinan tus obligaciones fiscales. Si no las cumples, puedes enfrentar desde multas y recargos hasta ser excluido del RESICO y pasar a un régimen fiscal donde los impuestos pueden ser una orden de magnitud más altos.

Por lo tanto, debemos entender que RESICO es para quienes están preparados para cumplir de forma constante con todas sus responsabilidades fiscales, a cambio de obtener un gran descuento en el cálculo del ISR.

Notemos que no estamos incluyendo el IVA, ya que este se sigue manejando de forma normal. El secreto viene con doctores, veterinarios y cirujanos dentistas, quienes tienen el beneficio único de estar exentos del pago de IVA.


Obligaciones fiscales simplificadas

RESICO es un régimen bastante especial, ya que está diseñado para que no necesites trabajar de forma cercana con un contador para cumplir con tus obligaciones. Esto lo logran simplificando ampliamente los requerimientos y eliminando algunos que otros regímenes fiscales sí requieren.

Cálculo básico del ISR

Una de las ventajas de RESICO es que todos tus ingresos (después del IVA, si no eres médico) se calculan sin tener que considerar los gastos de tu práctica médica. A cambio, el porcentaje de ISR en lugar de ser del 10-35% (en promedio) es del 1 al 2.5%.

Declaración anual

Otra ventaja recientemente introducida en abril del 2025 es la eliminación de la obligación de presentar tu declaración anual si estás en RESICO. Si bien esto suena bien (y efectivamente es una cosa menos en qué preocuparte), recomendamos hacerla si durante el año fiscal tus ingresos variaron mucho mes a mes, ya que podría resultar en que tu cálculo anual de ISR sea menor y obtengas una devolución.

Declaración mensual

La declaración en RESICO tiene la ventaja de venir, en su mayor parte, precargada con todas tus facturas. Si están bien hechas, significa que solo tienes que darle “Siguiente” al formulario. Aún existen algunos conceptos que debes conocer, pero la plataforma ha mejorado ampliamente en los últimos años, y muchas veces el mismo formulario te lo explica.

Además de precargar tu facturación, el formulario para presentar tu declaración mensual también calcula los impuestos a pagar, evitando que tengas que preocuparte por si lo hiciste bien o si escribiste algo incorrectamente.

En general, el formulario solo te pide validar que toda la información que tú mism@ has introducido durante el mes a través de tu facturación esté correcta. Fuera de eso, es bastante automático.


Importante: ser constante y seguir las reglas

Como ya mencionamos, RESICO es un beneficio cuyo propio nombre está basado en la confianza que el SAT deposita en ti, para que tú mism@ te mantengas al día con tu contabilidad en todo momento.

Que haya confianza no significa que el SAT no te revisará; al contrario, este régimen viene con la expectativa de que, si cometes errores —principalmente en no cumplir con tus responsabilidades—, se impondrán castigos severos. Esto incluye perder las obligaciones simplificadas, tener que rehacer tus declaraciones con cálculos normales y pagar impuestos muy por encima del 2.5%.

Facturación correcta y constante

Se espera que cada uno de tus ingresos esté debidamente sustentado con una factura CFDI 4.0 bien estructurada, con los datos e impuestos correctos que correspondan a tu práctica médica.

Declaración mensual

Se espera que presentes tu declaración mensual en tiempo y forma cada mes antes del día 17, y también que realices el pago desde una cuenta bancaria a tu nombre.

No ser accionista

Una regla muy importante en el Régimen de Confianza es que no puedes ser socio ni accionista de ninguna empresa dentro o fuera del territorio nacional.

Esto no significa que no puedas invertir tu dinero. A la fecha, aún tienes disponible CETES, SOFIPOs e inversión inmobiliaria.

Sin embargo, no podrás comprar acciones a través de GBM u otras plataformas. Las criptomonedas siguen siendo un tema tabú para el SAT, por lo que no podemos compartir una recomendación oficial al día de hoy.


En resumen

El Régimen Simplificado puede ser una forma bastante conveniente y saludable de comenzar tu vida fiscal si hoy en día ofreces tus servicios médicos de forma independiente y no has considerado la parte fiscal.

Mientras sigas las reglas del juego, puedes obtener amplios beneficios económicos con un esfuerzo mínimo y, lo más importante, sin necesidad de pagar a un contador.


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